Querido Kike Maílle, la verdad que su película Eva, ha sido un film
fascinante, con una trama compleja que abarca diferente temas al
mismo tiempo. Donde no ha faltado esa dulzura del amor en diferentes
etapas y al mismo tiempo esa necesidad de saber como acabará, y los
efectos especiales han sido impecables y de una profesionalidad, que
podría equipararse a una película americana sin ningún problema.
Y ahora
bien, entramos en esa cuestión que ha abarcado parte de su película,
y ha sido de mi necesidad cuestionarme y crear mi propia opinión,
partiendo de hechos de su película y continuando con hechos actuales
en el mundo de la tecnología ¿Se puede realmente crear inteligencia
emocional artificial?
Mi respuesta
a esta pregunta tan enigmática y polémica actualmente, es un no,
para mi la inteligencia emocional no se puede crear, se puede crear
inteligencia y capacidad de aprendizaje artificial, pero los
sentimientos, es algo tan etéreo y tan grande que ya de por si, se
le escapa a la raza humana. Uno nace y muere, condicionado por las
emociones, aprendemos que es odiar, que es amar, que es la felicidad,
vivimos constantemente alterados por estos sentimientos. Y para mí,
la inteligencia emocional en una máquina, jamás podrá rellenar ese
amplio contexto de emociones.
Si es cierto
que la capacidad de una mente humana, es algo tan desconocido aun
para nosotros, y que a cada día que evolucionamos descubrimos cosas
nuevas, inventamos, creamos y aprendemos. También se podría decir
que la ciencia, a cada paso que damos, consigue logros
impresionantes, y ya han logrado crear robots con una capacidad de
aprendizaje sorprendente. Pero como pueden enseñarles a sentir, a
sentir amor, a sentir rabia, a respetar… Aprendan lo que aprendan,
siguen siendo máquinas, construidas por nosotros, y pueden llegar a
sentir un atisbo de lo que son las emociones, pero siempre habrá un
gran vacío en ellos, siempre serán máquinas pase lo que pase.
Gracias por
su tiempo, un saludo cordial.